viernes, 16 de abril de 2010

RICKETTSIA.

El género Rickettsia está constituido por diferentes especies de bacterias gramnegativas, parásitos intracelulares obligados, muchos de los cuales constituyen actualmente paradigmas de patógenos emergentes. A excepción de R. prowazekii, su ciclo vital se mantiene al infectar especies de hospedadores (en general mamíferos), y vectores (en general garrapatas y pulgas), siendo el ser humano un huésped accidental. La patogenia común a todas consiste en una vasculitis de pequeños vasos por infección directa de las células endoteliales, produciéndose una pléyade de focos de vasculitis multisistémica. Según la distribución de las rickettsias se puede producir neumonitis intersticial, miopericarditis, lesiones vasculíticas cutáneas, meningitis linfocitaria, así como afectación hepática, renal y gastrointestinal. La clasificación más utilizada es la que divide a las rickettsiosis en dos grupos: el de las fiebres manchadas, y el de las fiebres tíficas. En nuestro entorno las dos entidades más frecuentes de ambos grupos son la fiebre botonosa mediterránea (producida por R. conorii) y el tifus murino (producido por R. typhi), respectivamente. El presente capítulo revisa estas entidades, así como otras rickettsiosis de interés por emergentes (R. slovaca, R. africae, R. prowazekii, R. felis), o por su alta incidencia en otras áreas (R. rickettsii, Orientia tsutsugamushi).

No hay comentarios:

Publicar un comentario